sábado, 4 de febrero de 2012

PRIMER CUMPLE DE SEXO, DROGAS Y CINE ESPAÑOL (I): UN AÑO DE CINE

Fue un año. Todo ocurrió en solo un año. El 4 de Febrero de 2011 nació "Eva", y "Chico y Rita" no podían ser más felices. Ya tenían la parejita: el 4 de Febrero. El mismo día que, exactamente 3 años antes, habían tenido a su primogénito: Iván. Y el hospital se llenó rápidamente de gente, todos querían ver a esta nueva y preciosa niña que había pesado 4 kilos: los tíos, los "primos", los "amigos..." Bueno, todos no. Faltaban los abuelos...


Al volver a casa, todo eran cambios. Sobre todo para Iván, que pasaba a dormir sólo en su propia habitación. Y no lo llevó bien... Eran las 3 de la mañana de esa primera noche, cuando alguien irrumpió de golpe en la habitación de Chico, Rita, y ahora también, de Eva, que dormía plácidamente en su cuna. 



-Papá, papá..."¿estás ahí?". ¡He tenido una pesadilla! Dejarme dormir con vosotros, ¡porfi!- dijo Iván. -"No tengas miedo" Iván, ha sido solo un sueño- le contestó un somnoliento Chico, mientras les hacía un hueco en la cama. 

Pero ese sueño se le repitió durante las tres noches siguientes. En este, "El sueño de Iván", el chico recorría un largo y solitario desierto, con hambre, sueño y calor, y sin nadie que le ayudase, cuando, de repente, de la nada, aparecía un hombre: -Soy "Blackthorn"- le decía. -Estás solo Iván, te han desplazado. Ya no tienes a nadie que te vaya a ayudar, que vaya a estar pendiente de ti. Ya nadie te va a cuidar.- Y entonces desaparecía. Y el desierto, súbitamente, se convertía en un frío, silencioso, e igualmente solitario, paisaje helado: "Silencio en la nieve".

Al quinto día, Chico se presentó en casa con un enorme oso blanco de peluche para Iván. -Papá..."¿para qué sirve un oso?"- preguntó el pequeño. -Este oso te protegerá "mientras duermes" para que nada malo te paso. Eso sí, necesita un nombre, ¿cuál quieres ponerle?- Iván no se lo pensó dos veces -Le llamáre "Copito de nieve"- dijo gritando, con una enorme sonrisa en la cara. Y aquella pesadilla nunca volvió...

Y los días siguieron pasando felices para la familia. Chico y Rita tenían todo lo que habían podido imaginar. Todo con lo que no podrían ni haber soñado. Por fin, tras unos tormentosos años al principio de su relación, habían encontrado "la chispa de la vida"... Hasta que, de repente, todo se torció. El 23 de Febrero. Maldito "23-F"... Ese día, Chico fue al médico, debido a que llevaba varios días con jaquecas, algo que él achacaba a lo poco que estaba durmiendo desde que nació Eva. Pero Rita insistió para que fuera a consulta. Lo que nunca se pudo imaginar, es que tras unos cuantos días haciéndose pruebas, le detectaran lo peor: -Óscar, tienes un tumor cerebral. Maligno. No hay posibilidad de operarlo, ya que está en una zona muy delicada-. Y Chico, u Óscar, su verdadero nombre, se hundió. Se vino abajo. Se convirtió en "la mitad de Óscar".


Y !zás¡. Se rompió la magia. Se rompió el hechizo. Rita tuvo que empezar a tirar de una casa con tres niños. Chico, que había dado un vuelvo total a su vida tras una más que turbulenta adolescencia, tras llegar a España, tras conocer a Rita, no hacía más que darle vueltas a aquella frase que recibió de la mujer a la que dejó viuda, casi accidentalmente, con solo 17 años: "No habrá paz para los malvados".

-Tienes que luchar- le dijo Iván cuando le explicaron, entre lágrimas, lo que ocurría -Como yo, que "De mayor quiero ser soldado". Tienes que ser fuerte como ese hombre del que siempre me hablas: "El Capitán Trueno". O como  "Águila roja".

Pero Chico dejó de luchar, a pesar de los intentos de Rita e Iván por animarle. A pesar de la dulce sonrisa de Eva. Como cuando en Mayo, organizaron juntos aquel viaje: -Dime, Iván, ¿dónde quieres que vayamos? ¿A  "Katmandú"?- preguntó Rita. -¿Katmandú? ¿Eso qué es? ¡Yo quiero ir a Disneyland!- respondió el pequeño. -¿A Disneyland? ¿A París? ¡Qué buena idea!

Y así fue: cogieron el "boleto al paraíso", y una semana después, los cuatro estaban en París, montando en todas las atracciones de Disneyland que podían, subiendo a la Torre Eiffel, pasando una mágica "medianoche en París"... Todo parecía volver a la normalidad, los problemas habían desaparecido, eran felices de nuevo: "La vida sublime".

Pero al volver a casa, aquella cortina de humo se desvaneció por completo y Chico cayó por completo en depresión. Todo fue "un cuento chino". Y Chico no podía seguir viendo a Rita sufrir así por él. Así que, una mañana de Junio, estando sólo en casa, decidió sacar todos sus ahorros, ponerlos en una cajita y dejar esta en la mesilla de noche, junto a una carta para su amada mujer. Hacer las maletas y coger un vuelo:

Querida Rita:
estos cinco años junto a ti han sido los cinco únicos años felices de mi vida. Me sacaste de la más absoluta miseria, del infierno... Un infierno al que ahora me toca volver. Encontraste a un ser despreciable, y solo con tu amor y tu cariño, conseguí resolver mi puzzle: el "puzzled love". Y al final, me convertiste en una persona. Te lo debo todo. Te adoro. Las dos únicas cosas buenas que he hecho en mi vida, Iván y Eva, las he hecho junto a ti, y no sabes lo afortunado que me siento por ello. Por eso ahora que "un Dios Salvaje"  me arrebata todo, y que ya no me siento capacitado para hacerte feliz, a ti, que lo has hecho todo por mí, que has sido todo en mi vida, he decidido irme. Porque esto no es amor: es "lo contrario al amor". Y no puedo seguir luchando contra estos sentimientos que tengo "secuestrados". No me siento, no me reconozco. No sé quien está viviendo en "la piel que habito". Yo ya no puedo ser feliz, y tú te mereces serlo. No soy capaz de hacer feliz a nadie, es mi sino. Vuelvo a mis orígenes, a mi antigua casa, a morir junto a mi madre. Como diría ella: "Maktub", estaba escrito.
Con amor eterno, tu Chico.


Cuanta razón había en ese pedazo de papel... Rita, una niña bien, conoció a Óscar 5 años antes, con sólo 17 años. El venía huyendo de Marruecos, tras un acto, un terrible acto, que se le quedaría grabado para siempre. Es cierto que fue un acto involuntario, pero también que llevaba muchos años tonteando con la mala vida, que podría ocurrir algo similar en cualquier momento...

-¡Chico, chico!- le gritó ella. -¡Qué se te ha caído la cartera!- le dijo cuando consiguió alcanzarle. Óscar ya la había escuchado antes, pero no pensó que se refiriese a él. Jamás pensaría que esa preciosa joven se podría dirigir a él. Normalmente, solían hacer lo contrario: cambiarse de acera. Pero esa chica era distinta. Y desde ese momento, desde ese preciso momento, un "torrente" de sentimientos se llevó a los dos por delante. Ya pasaron juntos esa misma primera noche. Óscar se quedaría ya con `Chico´para siempre. -Te amo- pronunció solo una semana después, él para el cual, "el género femenino" nunca había importado más allá de lo sexual.-"No lo llames amor...llámalo X"- contestó ella, con su habitual brillante sonrisa. Pero ambos sabían que el flechazo había sido instantáneo. Y nadie lo entendió, sobre todo en el caso de ella. -¿Qué haces con ese indeseable?- le gritaba su padre cada día. Chico nunca le escondió "la cara oculta" que tenía, pero le prometió cambiar. Y ella confió en él. Y él lo hizo. Y sólo 6 meses después, Rita se quedó embarazada. Y entonces, renunció a todo: a su carrera, a su familia... Ya se sabe, nadie entiende "las razones del corazón".



Pero ahora Chico se había ido. Se había escapado. Había enloquecido. "Fuga de cerebros". Y ella tuvo que volver a casa a pedir ayuda: no podría, sola, con aquellas dos, cariñosamente hablando, "Bestezuelas". Y en su casa la recibieron con los brazos abiertos: su chica bonita, la niña de sus ojos, su ojito derecho, había vuelto por fin. -Siempre que vengas sin él, esta casa está "open 24h" para tí. Llevaba tanto tiempo esperando esto...- Rita no reconocía a aquella mujer, a la que fue su "Mami Blue", que ahora se alegraba de que lo estuviera pasando mal. Pero no tenía otra opción. Tuvo que fingir que era lo que quería, aunque allí se sentía como si fueran "Intruders". Y así, fue pasando el tiempo. Un día tras otro, todos iguales. Una mañana eterna, una tarde interminable y "la noche que no acaba".

En Navidades, Rita decidió ir junto a sus hijos a visitar a Chico. A que la abuela conociera a sus nietos. Pero sobre todo, a despedirse de él, a verle por última vez. Llegaron el mismo día de Nochevieja: -"Feliz año abuela"- dijo Iván, al conocer a aquella desconocida, pequeña, encorvada, con la cara llena de "arrugas". Sorprendía verla tan débil en comparación con la robusta constitución de Óscar. O eso recordaban. Porque al entrar a verle a su habitación, en aquel cuchitril de "cinco metros cuadrados", se encontraron una sombra del hombre al que recordaban, posado en una cama. Inmóvil. Inexpresivo. Con pulso, sí. Pero muerto ya. Chico intentó decir algo, pero ya nada salió de su boca. "La voz dormida". Iván corrió a abrazarle, llorando, pero su abuela, al rato le apartó: -Está muy débil. Y "los muertos no se tocan, nene".


Rita decidió volver con los niños, tres días después. Dejarlos en casa, en España, y volver a Marruecos a ver como moría ese que, aunque ahora prácticamente no lo reconociera en esa "promoción fantasma" en la que estaba inmerso, era su amor. 


Y el día llegó. El 4 de Febrero. El día que Iván cumplía 4 años. El día que Rita cumplía 1. "La noche que murió Elvis". Morir. Que "verbo" tan difícil de pronunciar... Y justo antes de hacerlo, a Óscar le dio tiempo a pronunciar al oído de su amada sus últimas palabras: -"Vidas pequeñas", no somos más que eso. Y yo me voy ya, pero tú tienes dos vidas pequeñas más por las que estás obligada a ser feliz. Siempre. Te amo- Y así, sin más, cerró los ojos. Solo había pasado un año desde el día más feliz en la vida de Rita hasta el más triste. Pero ahora tocaba salir adelante. Sonreír, ser feliz. Divertirse. Pasar otro año de cine.






3 comentarios:

  1. Precioso!!!!
    Felicidades por este primer año y que sean muchos más!!!

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  2. Genial Dani!!Me han encantado. Serán muchos más.

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  3. Menuda manera de hilar todos esos títulos... ha quedado genial. Felicidades!!!

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