CRÍTICA DE "PROMOCIÓN FANTASMA", DESDE HOY EN NUESTRAS PANTALLAS

Estoy a dos exámenes y diez días (si Dios quiere...y esperemos que quiera) de terminar la carrera de Magisterio de Primaria, y hoy, justo hoy, los dos estrenos de nuestro cine ("Promoción fantasma" y "Katmandú, un espejo en el cielo") están relacionados con la enseñanza. ¿Casualidad? ¿El destino me está diciendo que me ponga a estudiar? ¿Qué vaya al cine? Creo que opto por la segunda opción. Y, además, como ya dije en el post de ayer, reivindico la risoterapía para ayudar a todos los que estamos de exámenes. Así que la primera crítica que publicaré será la de la comedia: "Promoción fantasma".

Ah, y una vez que apruebe, también quiero reivindicar mi derecho a tener la fiesta de graduación en el gimnasio, con el ponche, supuestamente sin alcohol, saboteado por los alumnos más "conflictivos", los empollones borrachos a consecuencia de ello, los profesores borrachos a consecuencia de ello,  mis preciosas compañeras, vestidas además con sus mejores galas, borrachas a consecuencia de ello, para así poder bailar agarrado a ellas (que no arrimado a modo reggetoniano) las canciones clásicas de los 80. La fiesta de graduación que nunca tuve, ni al terminar la ESO, ni el Bachillerato. Sí, me he puesto romántico...pero a ver quien no lo hace cuando suena el "Total eclipse of the heart".

Y puestos a reivindicar, también reivindico mi derecho a que todos los que han trabajado en esta película (y cuando digo todos, son TODOS...todos los nombres que aparecen en los créditos finales, y mira que son largos) acepten mis disculpas, tras escribir el pasado 26 de Noviembre, y cito textualmente, que "a pesar de los grandes nombres que hay, a mí no me llama nada la atención..." Ya empecé a recular cuando llegaron a mis oídos/ojos las primeras críticas (anteayer escribí  "Y aunque en su día dije que el trailer no me llamaba nada la atención, de momento estoy escuchando muy buenas cosas sobre ella"), pero ahora, no me queda otra que pedir perdón.

Porque sí. Porque estamos ante unas de las grandes sorpresas de nuestro cine en el 2012. Una película que sirve como homenaje a tantas y tantas películas juveniles de los 80. Se me vienen a la cabeza, así, a bote pronto, "El club de los cinco", "Los Goonies", "Regreso al futuro"... En definitiva, al cine con el que hemos crecido muchos de nosotros. Al cine con el que me enganché a este, el séptimo arte. Y he dicho homenaje, que no parodia regulera de algo, que por sí, ya era malo: esa fue mi impresión de "Spanish Movie". Y además, homenaje bien hecho.

Y es que con esta "Promoción Fantasma", Javier Ruiz Caldera me ha ganado. Esta es una gran comedia desde el baile del clásico "Saturday night" de Whigfield de la primera escena, hasta el "Que se jodan los vivos" que canta Alfa al final de los créditos, pasando, entre otras muchas, por la ya nombrada "Total eclipse to the heart" y la imprescindible "Enamorado de la moda juvenil" de Radio Futura (también soy un enamorado de la música de los 80, y eso que no fui adolescente hasta el siglo XXI). Y no sólo por divertida, que también, lo es. Si no por simpática. Porque hacer reír en un momento puntual es fácil, pero casi ninguna película te consigue mantener una sonrisa de principio a fin. Y esta, lo logra. 

Y ojo, que a pesar de lo que pueda parecer por su, a mí modo de ver, equivocado trailer, alguna que otra escena innecesaria y  una sub-trama que no me termina de cuadrar, "Promoción Fantasma" no es solo una película para adolescentes, si no un film para todos los públicos. De pequeños a mayores. Aprovechad que llega a 300 pantallas, por lo que tendréis la oportunidad de verla seáis de donde seáis. Especialmente, si necesitáis una cura de (son)risoterapía. Es, sin duda, la mejor comedia que hay ahora mismo en cartelera.

A ello ayuda, por supuesto, contar con uno de nuestros mejores actores: Raúl Arévalo. Da igual lo que le pongan a este chico por delante: el madrileño borda todos y cada de sus papeles, no importa el género del que se trate. Los números hablan por sí solos: nominaciones al Goya, por dramas como "Siete mesas de billar francés" o "Los girasoles ciegos", a los que suma el premio por la tragicomedia "Gordos". Pero es que este año ha logrado lo que muy, muy pocos habían conseguido antes: optar a estos premios por una comedia (Mejor Actor de Reparto por "Primos"). Y es que cualquier premio se le queda corto. Las comparaciones (desde Michael J. Fox hasta Sean Penn) también. No hay más que ver su escena "Enamorarse" en "8 citas" para darse cuenta del enorme talento que posee. Aquí, como no, vuelve a brillar, interpretando a Modesto, un profesor que es capaz de ver a los muertos, cargando  absolutamente con el peso de la película, algo que nunca antes había hecho en el cine.

A Raúl le acompañan en el reparto, la siempre fantástica Alexandra Jiménez, los desternillantes Carlos Areces, Silvia Abril y Joaquín Reyes, Luís Varela en un papel que nos recuerda al que realizó en "Crimen Ferpecto", además de un grupo de jóvenes entre los que destacan los nombres de Aura Garrido, Andrea Duro y Jaime Olías, pero sin olvidarnos de que los trabajos de los, quizás, menos conocidos Anna Castillo, Alex Maruny y Javier Bódalo no les van a la zaga.

Es difícil saber si este film es uno de esos que te dejan marcado (que al fin y al cabo, es lo que hace grande a las películas), o sólo de las que se van olvidando con el tiempo, pero de momento...

MI VALORACIÓN: 7,5

PD: En serio, imprescindible banda sonora.