CRÍTICA DE "EVA", FANTÁSTICA PELÍCULA QUE LLEGA MAÑANA A NUESTRAS PANTALLAS

Mañana llega a nuestras pantallas “Eva”, la ópera prima del director barcelonés Kike Maíllo (uno de los creadores de la fabulosa serie de animación “Arròs Covat”), un film nacido en la ESCAC, la Escola Superior de Cinema i Audiovisuals de Catalunya, y producido por Escándalo Films y Ran Entertairment. Una película distinta a todas las creadas anteriormente en nuestro país, que ganó en el pasado Festival de Sitges, el Premio de Mejor Efectos Especiales. Un maravilloso drama en el que la ciencia ficción y la realidad se complementan a la perfección.

"¿Qué ves cuando cierras los ojos?..." Año 2041. En un futuro no muy lejano, los seres humanos viven acompañados de criaturas mecánicas. Álex, un reputado ingeniero cibernético, regresa a Santa Irene, después de diez años de ausencia, para realizar un encargo de la Facultad de Robótica: la creación de un niño robot. Durante ese tiempo, su hermano David y Lana, la antigua novia de Álex, se han casado. Inesperadamente, la rutinaria vida de Álex se verá alterada por Eva, la hija de Lana y David, una niña extraordinaria, magnética, que desde el primer momento establece una relación de complicidad con Álex. Juntos emprenderán una aventura que los conducirá a un final revelador.

Una idea queda clara desde a priori: te guste o no te guste la película, “Eva” es una maravillosa noticia para nuestro cine. Una película atrevida, una propuesta arriesgada, un proyecto peculiar... La primera de estas peculiaridades es que “Eva” no es una película: son dos películas. No es un film rodado en catalán y luego doblado al castellano ni vicecersa. En “Eva” cada escena se ha rodado dos veces, una en cada lengua. Tampoco es habitual ver una película de ciencia-ficción en nuestro país, futurista y con unos efectos tan bien logrados como los que hay aquí. Un film muy bien realizado, en el que destaca su hermosísima fotografía. Y todo esto está muy bien, sí...pero al fin y al cabo, uno no va al cine a ver un film logrado, si no una buena historia.

Pero es que, además de todo lo anterior, “Eva” la tiene. Una historia sentimental, inteligente, bella... Una maravillosa contradicción entre el cine futurista y una historia habitual del cine clásico. Un escenario tan frío como agradable. Un futuro con una imagen retro. Unos robots con sentimientos humanos. Pero es que todas estas contradicciones están perfectamente fusionadas bajo la varita de Kike Maíllo y su equipo. Un aplauso para ellos. El film nace de una idea similar a la de “Inteligencia Artificial”, pero el propio Kike Maíllo ha reconocido que sus referencia son dos films tan distintos como “Blade Runner” y “Beautiful girls”. Y hasta en esta contradicción ha acertado. Robots humanizados al estilo de los de la primera, en un universo muy parecido (fotografía incluida) al de la segunda, y con una “Eva” que nos recuerda mucho a aquella bisoña Natalie Portman ¿A cuántos premios Goya podrá ser candidata? Como ya hemos dicho, es fácil que su fotografía y sus efectos especiales estén presentes en la gala, amén de Kike como mejor Director Novel. ¿A cuántos premios técnicos más? ¿Montaje, sonido, diseño de vestuario...?

Pero es que, además, “Eva” es una película en el que cada protagonista brilla tanto o más que el anterior. En primer lugar, cuando, en su día, me opuse a que los niños menores de 16 años no pudieran optar al Premio Goya, era por casos como el de Claudia Vega (A.K.A. Eva). No digo que hubiera ganado como Mejor Actriz Revelación, por que este será, seguramente, un merecidísimo premio para María León. Pero una nominación habría hecho justicia a su asombrosa y adorable interpretación. Hay que seguir de cerca a esta chiquilla, quizás, uno de los nuevos talentos de nuestro cine.

Daniel Brühl, uno de nuestros actores más internacionales y prolíficos, podría estar nominado como Mejor Actor Protagonista, ya que vuelve a bordar su interpretación. Pero hay un gran problema: Coronado, Tosar, Banderas y Tejero ya están perfilándose como los grandes favoritos a copar las cuatro candidaturas. Y esto, sin contar con los extranjeros Owen, Wilson y Darín. ¿No ha llegado aún el momento de perder el complejo y añadir la quinta nominación? Nivel hay de sobra.

¿Y con Marta Etura qué hacemos? Hace nada, en la crítica de “Mientras duermes”, ya dije que esta actriz es maravillosa, que llena la pantalla de luz con su sonrisa. Y aquí me veo obligado a repetirme. Se me han acabado los adjetivos para ella... Sin embargo, tanto brillo deja en la sombra el papel un tanto más oscuro y sin oportunidad de lucimiento, de Alberto Amman. Caso aparte es el de Lluís Homar. Una máquina. Aquí, literalmente. Al salir de ver “Eva” me dí cuenta de que es la segunda vez que pienso este año (lo mismo me ocurrió con “No tengas miedo”) que qué hace un genio como él sin ningún Premio Goya en su haber. Señores académicos: Goya para Lluís Homar ya.

"¿Qué ves cuando cierras los ojos?" Veo que "Eva" es una de las películas del año.

Mi valoración: 8,5